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Análisis Hecho en Clase

48 - "Venid A Cristo"

Moroni 7-8; 10


¡Bienvenidos a la clase de hoy! Empecemos como es de costumbre con un resumen de los capítulos de la porción de Escrituras de hoy.

Moroni 7:1–19
Mormón explica cómo juzgar entre el bien y el mal (nótese que estas palabras fueron registradas por
Moroni, el hijo de Mormón).
Moroni 7:20–48
Mormón explica que la fe en Cristo es el poder mediante el cual se hacen milagros; explica la importancia de la fe,
la esperanza y la caridad.
Moroni 8
En una epístola a Moroni, Mormón indica las condiciones para obtener la salvación y explica que los niños
pequeños son salvos mediante la expiación de Cristo.
Moroni 10
Moroni explica que el Espíritu Santo da testimonio de toda verdad a los que piden con fe; describe los
dones espirituales y exhorta a todos a venir a Cristo

¡Bienvenidos a la última lección de este año sobre el Libro de Mormón! En la Lección #47 escribí detalladamente sobre el significado de que ésta sea la última lección de un CICLO. A pesar de ser una porción de Escrituras de 3 capítulos, encontramos aquí doctrinas esenciales, en forma muy condensada. Eso implica que hay mucho por escudriñar aquí. Antes de proseguir quisiera presentar 3 imágenes para que de alguna manera podamos relacionarlas con el mensaje que Mormón y Moroni nos dejan en el último libro.





El Hermano De Jared
Las Planchas De Oro
Moroni Esconde Las
Planchas


¿Cómo se relacionan estas tres imágenes, teniendo en cuenta las enseñanzas que hemos recibido en los últimos 3 meses? ¿Parece difícil? ¡No es así! Recordemos que Mormón y Moroni trabajaron como equipo para que nosotros tuviéramos bien en claro que "estas cosas saldrán". (Ver la Lección #44 para repasar los conceptos).

En la lámina del centro se observa un detalle que representa la porción sellada del Libro, la cual contiene una compilación de las visiones del Hermano de Jared. En la porción de Escrituras de hoy vemos a Moroni esconder estos registros, y demostrar mucho amor por los gentiles y por los descendientes de Lehi. Recordemos además cómo Moroni transmite el mensaje enviado por el Salvador:

Moroni 10
27  Y os exhorto a que recordéis estas cosas; pues se acerca rápidamente el día en que sabréis que no miento, porque me veréis ante el tribunal de Dios; y el Señor Dios os dirá: ¿No os declaré mis palabras, que fueron escritas por este hombre, como uno que clamaba de entre los muertos, sí, como uno que hablaba desde el polvo?
28  Declaro estas cosas para el cumplimiento de las profecías. Y he aquí, procederán de la boca del Dios sempiterno; y su palabra resonará de generación en generación.
29  Y Dios os mostrará que lo que he escrito es verdadero.


Una Enseñanza Esencial De Mormón
Moroni 8
25  Y las primicias del arrepentimiento es el bautismo; y el bautismo viene por la fe para cumplir los mandamientos; y el cumplimiento de los mandamientos trae la remisión de los pecados;
26  y la remisión de los pecados trae la mansedumbre y la humildad de corazón; y por motivo de la mansedumbre y la humildad de corazón viene la visitación del Espíritu Santo, el cual Consolador llena de esperanza y de amor perfecto, amor que perdura por la diligencia en la oración, hasta que venga el fin, cuando todos los santos morarán con Dios.


¿Parece simple verdad? Esta es una enseñanza MUY concentrada. ¿Se animan a ordenar los conceptos si se los doy desordenados? Parece fácil ... pero ...













Y el orden correcto (basándose en la Escritura) es ...



 
Fe



Esperanza
Amor Perfecto





Hablemos un poco sobre esta enseñanza esencial. Todo parece comenzar con la FE. Pero según hemos aprendido en la Lección #46, los elementos de la fe son 3: Conocer la Palabra de Dios + Creer la Palabra + Hacer La Palabra. Ya hemos visto que esto concuerda perfectamente con las enseñanzas de los profetas nefitas. Así que está supuesto en el texto que previamente tenemos un contacto con la Palabra de Dios (Sus Mandamientos) para tener la base para ejercer la Fe. También recordemos que estos 3 elementos (C-C-H) están sustentados por un período de espera, que precisamente pone a prueba nuestra determinación de Hacer las cosas que Dios nos pide antes de recibir un testimonio.

Así pues el orden es (1) Mandamientos de Dios + (2) Fe + (3) Arrepentimiento. Hemos visto este año en todas las oportunidades que se enseña la Doctrina de Cristo en el Libro de Mormón que el arrepentimiento es el mensaje básico de la Roca de Cristo. Desde donde nos hallemos siempre veremos que somos imperfectos en comparación a la bondad, misericordia y longanimidad de Dios. La semana pasada vimos que es esencial meditar en estas cosas para recordar siempre a Cristo.

El cumplimiento de los mandamientos trae en definitiva la (5) Remisión de Pecados. Los mandamientos relacionados son (2) Fe + (3) Arrepentimiento + (4) Bautismo.

Cuando sentimos el amor, el perdón y la gracia de Dios en nuestra vida, eso trae aún más (6) Mansedumbre y Humildad de Corazón. Ya teníamos antes esta virtud, pero ahora está intensificada porque sentimos que somos perdonados por Dios. Se forma inmediatamente un lazo de unión al recibir (7) la Visitación del Espíritu Santo, ya sea como parte de la ordenanza de la confirmación, o como parte de renovar nuestros convenios bautismales.

El Espíritu Santo llena nuestro corazón de (8) Esperanza y (9) de Amor Perfecto. Repasemos algunas maravillosas enseñanzas:


Moroni 10
20  Por tanto, debe haber fe; y si debe haber fe, también debe haber esperanza; y si debe haber esperanza,
debe haber caridad también.
21  Y a menos que tengáis caridad, de ningún modo seréis salvos en el reino de Dios; ni seréis salvos en el reino de
Dios si no tenéis fe; ni tampoco, si no tenéis esperanza.
22  Y si no tenéis esperanza, os hallaréis en la desesperación; y la desesperación viene por causa de
la iniquidad.



Moroni 7
42  De manera que si un hombre tiene fe, es necesario que tenga esperanza; porque sin fe no puede haber esperanza.
43  Y además, he aquí os digo que el hombre no puede tener fe ni esperanza, a menos que sea manso
y humilde de corazón.
44  Porque si no, su fe y su esperanza son vanas, porque nadie es aceptable a Dios sino los mansos
y humildes de corazón; y si un hombre es manso y humilde de corazón, y confiesa por el poder
del Espíritu Santo que Jesús es el Cristo, es menester que tenga caridad; porque si no tiene caridad,
no es nada; por tanto, es necesario que tenga caridad.
45  Y la caridad es sufrida y es benigna, y no tiene envidia, ni se envanece, no busca lo suyo, no se irrita fácilmente, no piensa el mal, no se regocija en la iniquidad, sino se regocija en la verdad; todo lo sufre, todo lo cree,
todo lo espera, todo lo soporta.
46  Por tanto, amados hermanos míos, si no tenéis caridad, no sois nada, porque la caridad nunca deja de ser.
Allegaos, pues, a la caridad, que es mayor que todo, porque todas las cosas han de perecer;
47  pero la caridad es el amor puro de Cristo, y permanece para siempre;
y a quien la posea en el postrer día,
le irá bien.


Mormón enseña luego que el Amor Perfecto o Caridad (10) Perdura por la Diligencia en la Oración. Ya estudiamos antes la palabra diligencia (repasar especialmente la Lección #25 para recordar cómo se relaciona la diligencia con el espíritu de profecía y revelación. También la Lección #41, para repasar como la diligencia embellece a otras virtudes). ¿Cómo puede perdurar la caridad? Veamos:



Moroni 7
48  Por consiguiente, amados hermanos míos, pedid al Padre con toda la energía de vuestros corazones, que seáis llenos de este amor que él ha otorgado a todos los que son discípulos verdaderos de su Hijo Jesucristo; para que lleguéis a ser hijos de Dios; para que cuando él aparezca, seamos semejantes a él, porque lo veremos tal como es; para que tengamos esta esperanza; para que seamos purificados así como él es puro. Amén.

¡Qué hermosa Escritura! Noten la parte señalada en amarillo. En la Lección #37 aprendimos que el arrepentimiento conduce al poder del Redentor. En la misma lección la Voz de Cristo nos enseña que si Lo recibimos, nos concederá llegar a ser sus hijos y sus hijas (3 Nefi 9:17). Aquí Moroni 7 nos revela que debemos PEDIR AL PADRE en oración que seamos llenos de ese amor perfecto. Esta es la relación con la diligencia en la oración para que perdure aquello que hemos recibido. O mejor dicho, para que profundicemos nuestro discipulado. Ahora, mientras hacemos esto, mientras vivimos una vida ejerciendo amor perfecto, siendo sufridos, benignos, sin envidia, y todo lo que nos dice Moroni 7:42-48, en medio de todo esto llegará (11) El Fin. Para nosotros el FIN puede significar dos cosas. Recordemos una enseñanza de Pablo:



1 Corintios 15
51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados,
52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.
53 Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad.
54 Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria.
55 ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria?
56 ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley.

57 Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.
58 Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.

¡Qué maravilla este misterio! Al leerlo no puedo dejar de emocionarme y de escuchar la música del Mesías de Handel que acompaña a este versículo. Escuchar el sonido de la Trompeta de Dios. Si nos toca "dormir" antes de ese día, es lo mismo, porque por llevar una vida como discípulos de Cristo (12) Moraremos con Dios.

A continuación se detallan algunas enseñanzas importantes sobre la Fe, la Esperanza y la Caridad para motivar un ulterior estudio y escudriñamiento:



Pratt, Parley P., Key to the Science of Theology [SLC: Deseret Book Co., 1979], 132-33
El mundo de los espíritus no es el cielo donde Jesucristo, su Padre y otros seres moran, quienes por medio de la resurrección o por traslación, han ascendido a mansiones eternas y sido coronados y entronados con poder: [este mundo] es mejor dicho un estado intermedio, una probación, un lugar de preparación, mejoramiento, instrucción o educación, donde los espíritus son castigados y perfeccionados, y donde, si fueren hallados dignos, se les puede enseñar el conocimiento del Evangelio. En pocas palabras, es un lugar donde se predica el Evangelio, y donde se puede ejercer fe, arrepentimiento, esperanza y caridad; un lugar donde esperar la resurrección o redención del cuerpo; y también, para quienes lo merecen, es un lugar de castigo, un purgatorio o infierno, donde los espíritus reciben bofetones hasta el día de la redención.


Profeta Joseph Smith - Times and Seasons, 15 Aug. 1844 (Enseñanzas, p. 430-431)
Cuando subís por una escalera tenéis que empezar desde abajo y ascender paso a paso, hasta que lleguéis a la cima; y así es con los principios del evangelio: tenéis que empezar con el primero y seguir adelante hasta aprender todos los principios que atañen a la exaltación. Pero no los aprenderéis sino hasta mucho después que hayáis pasado velo. No todo se va a entender en este mundo; la obra de aprender nuestra salvación y exaltación aún más allá de la tumba será grande.



Penrose, Charles W. - Journal of Discourses, 26:26
¿Cómo podemos aprender a conocer a Dios? Podemos aprender sobre nuestro Padre rindiendo obediencia a Su voz, escuchando los susurros de su Santo Espíritu, ese espíritu que de Él proviene. "Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios." (Ro. 8:14) Podemos comprender mucho concerniente a Él por el poder del Espíritu Santo. El don del Espíritu Santo nos es conferido para que podamos aprender algo sobre Dios, para que podamos avanzar a la perfección; para que podamos caminar en Sus senderos; para que podamos subir la escalera que Él ha subido hasta la perfección; para que tal vez podamos vencer y ser hechos semejantes a Él, compartiendo Su gloria, y siendo uno con Él. Y si seguimos el curso que nuestro Padre ha tomado, viviendo de toda palabra que sale de Su boca, conoceremos lo que es justo, porque Él nos revelará la verdad, y es el conocimiento y la práctica de la verdad lo que produce exaltación.

Si aprendemos esto como Él lo ha aprendido, avanzaremos paso a paso, y venceremos al Maligno; venceremos al mundo y a la carne, tomaremos la maldad que nos salga al encuentro y la conquistaremos; tendremos la ayuda del Señor, y nos podremos elevar por medio de nuestro esfuerzo, de nuestra fidelidad, de nuestra obediencia hasta vencer todas las cosas, y heredar todas las cosas. De esta manera podremos elevarnos por encima de todo. Podremos obtener cuerpos gloriosos como el glorioso cuerpo del Hijo de Dios. Podremos prepararnos para la gloria celestial en la que moran el Padre y el Hijo, y ser hechos semejantes a Él en todo respecto, llegando a ser seres espirituales con cuerpos espirituales, vivificados por la gloria celestial, entre los Dioses, y entraremos en el santo orden que es sin principio de días ni fin de años (el sempiterno orden del santo Sacerdocio), que el Hijo posee, una porción del cual impartió a sus discípulos cuando se hallaba sobre la tierra, el cual ha restaurado a la tierra en estos últimos días.



Profeta Joseph Smith - Enseñanzas p 8
Escudriñad las revelaciones de Dios, estudiad las profecías, y gozaos de que Dios concede al mundo videntes y profetas. Estos son los que vieron los misterios de la Divinidad; vieron el diluvio antes que llegase; vieron ángeles ascender y descender por una escalera que llegaba desde la tierra hasta los cielos; vieron la piedra cortada del monte, que llenó toda la tierra; vieron al Hijo de Dios venir de las regiones de gloria y morar con los hombres sobre la tierra; vieron al libertador salir de Sión y limpiar la impiedad de Jacob; vieron la gloria del Señor cuando mostró una transfiguración de la tierra sobre el monte; vieron allanarse toda montaña y todo valle exaltarse cuando el Señor se vengaba de los inicuos; vieron la verdad brotar de la tierra y la justicia mirar desde los cielos en los últimos días, antes que el Señor viniese la segunda vez sobre la tierra y el sábado de la creación, coronado de paz; vieron el fin de los mil años gloriosos, cuando Satanás va a quedar suelto por un corto tiempo; vieron el día del juicio, cuando todos los hombres recibirán según sus obras; y vieron desaparecer los cielos y la tierra a fin de que hubiera lugar para la ciudad de Dios, cuando los justos recibirán una herencia eterna. Así pues, compañeros en esta peregrinación sobre la tierra, es vuestro el privilegio de purificaros, alcanzar la misma gloria, y ver y conocer por vosotros mismos. Pedid, y se os abrirá; buscad y hallaréis; llamad, y os será abierto.


¡Qué impresionantes enseñanzas! No en vano podemos decir que son "esenciales" (ver la definición en la Lección #37). Para finalizar (y me duele tener que hacerlo), brevemente les detallo las "Exhortaciones de Moroni", y algunas preguntas que pueden servir para analizar su significado en nuestra vida.


Las Exhortaciones De Moroni
Recordar Cuán Misericordioso
Ha Sido Dios
Moroni 10:3
Meditar En El Corazón
Moroni 10:3
Preguntar A Dios Sobre La Veracidad
De Estas Cosas
Moroni 10:4
No Negar El Poder De Dios
Moroni 10:7
No Negar Los Dones De Dios
Moroni 10:8-17
Recordar Que Toda Buena Dádiva
Viene De Cristo
Moroni 10:18
Dios Es El Mismo Ayer, Hoy
Y Para Siempre
Moroni 10:19
Los Dones Espirituales Son Eternos
Mientras No Haya Incredulidad
Moroni 10:19, 24-26
Debe Haber Fe, Esperanza Y Caridad
Moroni 10:20-23
Recordar Estas Cosas
Moroni 10:27-29
Venid A Cristo Y
Perfeccionaos En Él
Moroni 10:30-33

¿Qué significa la palabra exhortar?
¿Han obtenido un testimonio de que el Libro de Mormón es la palabra de Dios.
¿Qué papel desempeña el Espíritu Santo en la obtención de un testimonio de las cosas espirituales?

¿Por qué no podemos obtener un testimonio sólo por medio del intelecto?  Véase 1 Corintios 2:11; Alma 26:21–22;   Moroni 10:6–7.


Moroni nos exhortó: “...no neguéis el poder de Dios” (Moroni 10:7). ¿De qué manera podríamos en ocasiones negar el poder de Dios?

Élder Jeffrey R. Holland, "Come unto Me", Ensign, abril de 1998, pág. 19
El Salvador dijo: ‘La paz os dejo, mi paz os doy... No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo’ (Juan 14:27).
Les digo que es posible que ése sea uno de los mandamientos que, aun en el corazón de los Santos de los Últimos Días fieles, se desobedece casi universalmente; y sin embargo, me pregunto si nuestra resistencia a esta invitación pudiera causar más dolor en el corazón misericordioso del Señor. Como padre que soy, les puedo decir esto: aunque me preocuparía mucho el que uno de mis hijos, en algún momento de su vida, estuviera seriamente atribulado, fuera infeliz o desobediente, no obstante, me sentiría infinitamente más desconsolado si pensara que en esos momentos ese hijo no pudiera confiar en que yo le ayudaría o si pensara que sus intereses personales no tuvieran importancia para mí o no estuvieran a salvo bajo mi cuidado. De igual modo, estoy convencido de que ninguno de nosotros puede apreciar cuán profundamente herido se siente el amoroso corazón del Salvador del mundo cuando se entera de que su pueblo no confía en Su cuidado ni se siente seguro en Sus manos ni confía en Sus mandamientos.


¿Qué enseñó Moroni acerca de los dones espirituales? (Véase Moroni 10:8–19.)
¿Por qué cada uno de nosotros recibe distintos dones de Dios? (Véase D. y C. 46:11–12.)

¿Qué han aprendido y qué han sentido al meditar en los mensajes del Libro de Mormón?

¿En qué forma la exhortación de Moroni de “venir a Cristo” refleja el mensaje total del Libro de Mormón? (Moroni 10:30, 32.)
¿De qué maneras específicas les ha ayudado a venir a Cristo el estudio que han hecho este año del Libro de Mormón?





Moroni 10
34  Y ahora me despido de todos. Pronto iré a descansar en el paraíso de Dios,
hasta que mi espíritu y mi cuerpo de nuevo se reúnan,
y sea llevado triunfante por el aire, para encontraros
ante el agradable tribunal del gran Jehová,
el Juez Eterno de vivos y muertos.
Amén.







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