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Análisis Hecho en Clase

10 - Ésta Es Mi Voz A Todos

D&C 25




Lea Aquí La Porción de Escrituras
del Libro de Mormón


¡Bienvenidos a la clase de hoy! Muchas de las revelaciones que se encuentran en Doctrina y Convenios se dieron a personas en forma individual; sin embargo, a pesar de que el consejo que se da en esas revelaciones se dio específicamente para esas personas, y de que esos miembros de la Iglesia vivieron hace muchos años, gran parte de ese consejo se aplica a nosotros en la actualidad. Esto es especialmente cierto en D&C 25, la porción de Escrituras para hoy. El versículo final nos sorprende con estas palabras:

D&C 25
16  Y de cierto, de cierto te digo, que ésta es mi voz a todos. Amén.

En julio de 1830, el Señor dio una revelación dirigida a Emma Smith, la esposa del profeta José Smith (D. y C. 25). En ella encontramos enseñanzas muy variadas, las cuales Ustedes podrán estudiar y aplicar. La Guía de Estudio para el Miembro de la Clase les ayudará en su estudio. Hoy en forma particular me gustaría que repasáramos un consejo que le da Dios a Emma y a todos nosotros.

Un Consejo Fundamental
Para La Vida Espiritual


D&C 25

14  Continúa con el espíritu de mansedumbre y cuídate del orgullo.

Veamos cómo el Señor dió instrucciones similares a otros miembros de la Iglesia:

D&C 23
1  HE aquí, Oliver, te hablo unas pocas palabras. He aquí, bendito eres y no estás bajo condenación. Mas cuídate del orgullo, no sea que entres en tentación.


A Oliver Cowdery
D&C 38
39  Y si buscáis las riquezas que según su voluntad el Padre quiere daros, seréis los más ricos de todos los pueblos, porque tendréis las riquezas de la eternidad; y es menester que las riquezas de la tierra sean mías para dar; mas cuidaos del orgullo, no sea que lleguéis a ser como los nefitas de la antigüedad.


A Los Santos En Una Conferencia De La Iglesia

D&C 90
17  No os avergoncéis, ni os sintáis confundidos; mas sed amonestados en toda vuestra altivez y orgullo, porque esto tiende un lazo a vuestras almas.



A La Primera Presidencia De La Iglesia

D&C 98
19  He aquí, yo, el Señor, no estoy bien complacido con muchos de los que son de la iglesia en Kirtland;
20  porque no abandonan sus pecados, ni sus malas costumbres, ni el orgullo de sus corazones, ni su codicia ni todas sus cosas abominables, para observar las palabras de sabiduría y de vida eterna que yo les he dado.


A Los Santos En Kirtland


En lo que resta de esta lección analizaremos partes del discurso pronunciado por el Profeta Ezra Taft Benson en la Conferencia General de Abril de 1989. Ustedes verán que he transcripto el texto completo en el material complementario de la lección de hoy. Les recomiendo estudiar estas palabras del profeta en forma completa.





Cuidaos Del Orgullo
Presidente Ezra Taft Benson, Liahona,
Julio 1989, p.4

La mayoría de nosotros piensa en el orgullo como egotismo, vanidad, jactancia, arrogancia o altivez; aunque todos éstos son elementos que forman parte de ese pecado, su núcleo no está en ellos.

La característica principal del orgullo es la enemistad: enemistad hacia Dios y enemistad hacia nuestros semejantes. Enemistad significa ‘aversión, odio, resentimiento’ u oposición. Es el poder por el cual Satanás desea dominarnos.

El Núcleo Del Orgullo
  • Enemistad Hacia Dios
  • Enemistad Hacia Los Semejantes
¿Por qué afecta el orgullo nuestra relación con Dios?

El orgullo en su naturaleza fomenta la competencia. Oponemos nuestra voluntad a la de Dios. Cuando lo hacemos blanco a Él de nuestro orgullo, es con la actitud de decir: ‘Que se haga mi voluntad y no la tuya’. Como dijo Pablo, "todos buscan lo suyo propio, no lo que es de Cristo Jesús" (Filipenses 2:21).

Nuestra voluntad en competencia con la de Dios deja que nuestros deseos, apetitos y pasiones corran desenfrenados.

Los orgullosos no pueden aceptar que la autoridad de Dios dé dirección a su vida. Ellos oponen su percepciones de la verdad contra el conocimiento omnisciente de Dios, su capacidad contra el poder del Sacerdocio de Dios, sus propios logros contra las obras grandiosos de Él.

Nuestra enemistad contra Dios puede ir marcada con etiquetas variadas, como la rebelión, la dureza de corazón, la dureza de cerviz, la impiedad, la vanidad, la facilidad para ofenderse y el deseo de recibir señales. Los orgullosos quieren que Dios esté de acuerdo con ellos; pero no tienen interés en cambiar de opinión para que la suya esté de acuerdo con la de Dios.

Los Enemigos De Dios

  • En Competencia
    Con Dios

  • Su Voluntad Es Más Importante Que Lo Que Dios Desea Para Ellos

  • Desenfreno De Deseos, Apetitos
    Y Pasiones

  • No Desean Que Dios Gobierne
    Sobre Ellos

  • Desprecian La Omnisciencia
    De Dios

  • Distintas Formas O Etiquetas De Presentación

¿Por qué afecta el orgullo nuestra relación con los demás?
Otro aspecto importante de este pecado tan prevaleciente es la enemistad hacia nuestros semejantes. Diariamente nos vemos tentados a elevarnos por encima de los demás y disminuirlos a ellos.

Los orgullosos hacen de toda persona su adversario oponiendo a los demás su intelecto, opiniones, trabajos, posesiones, talento y otros valores mundanos.

El orgullo es un pecado que se puede observar fácilmente en los demás, pero raramente admitimos en nosotros mismos. La mayoría de nosotros lo considera un pecado de los que están en la cumbre, como los ricos y los eruditos, mirándonos a nosotros "por encima del hombro". Sin embargo, hay una dolencia mucho más común entre nosotros, y es la del orgullo de los que están abajo mirando hacia arriba; éste se manifiesta de diversas formas, como la crítica, el chisme, la calumnia, la murmuración, la pretensión de gastar más de lo que tenemos, la envidia, la codicia, la supresión de la gratitud y el elogio que podrían elevar a otro, y el rencor y los celos.

El egoísmo es uno de los aspectos más comunes del orgullo. ‘La forma en que todo me afecta a mí’ es la idea central de lo que es importante para la persona: el orgullo de quién es, la autocompasión, el interés por la fama del mundo, la gratificación de los deseos personales y de los propios intereses.

Otro aspecto del orgullo es la contención. Las discusiones acaloradas, las peleas, el dominio injusto, las grandes brechas entre las generaciones, el divorcio, el abuso de cónyuges, los tumultos y disturbios, todos encajan en esta categoría del orgullo.


La Enemistad Hacia

Los Semejantes

  • Elevarse Sobre Otros

  • Disminuir A Otros

  • Oposición En Áreas Del Intelecto, Posesiones Y En Otros Valores

  • El Orgullo De Los De Abajo Mirando Hacia Arriba

  • Egoísmo

  • Contención



criticar = expresar un juicio desfavorable sobre una persona o sobre su actuación, obra, etc. (censurar, reprobar)

GUÍA PARA EL ESTUDIO DE LAS ESCRITURAS: CHISME
Contar a alguien hechos o información personales acerca de otra persona sin la aprobación de ésta.

GUÍA PARA EL ESTUDIO DE LAS ESCRITURAS: CALUMNIAS
Decir algo incorrecto, dañino o inicuo. En las Escrituras, a menudo se refiere a personas que hablan de otras con la intención específica de causarles dolor.

GUÍA PARA EL ESTUDIO DE LAS ESCRITURAS: MURMURAR
Quejarse contra los propósitos, planes o siervos de Dios.

pretensión = acción o efecto de pretender; derecho mal o bien fundado que uno juzga tener sobre una cosa.
pretender = desear la posesión o realización de algo y hacer lo necesario para conseguirlo; afirmar alguien una cosa de cuya verdad no está seguro.

envidia = sufrimiento de un persona porque otra posee algo que ella no tiene o no puede obtener.

codicia = deseo exagerado de poseer mucho, particularmente riquezas (ambición).

rencor = sentimiento hostil y persistente contra una persona producido por una ofensa, humillación o perjuicio inferido por ella (resentimiento).

celo, celos = cuidado y diligencia con que alguien hace lo que tiene a su cargo; sospecha o inquietud de que la persona amada quiera a otra; sentir envidia de alguien o desconfianza de que otra persona le gane ventaja.

¿Cómo podemos vencer el orgullo y cultivar
un espíritu de mansedumbre?

Su antídoto es la humildad, la mansedumbre, la docilidad. Es el corazón quebrantado y el espíritu contrito.
El Antídoto

Humildad, Mansedumbre y Docilidad

Alma 32

16  Por tanto, benditos son aquellos que se humillan sin verse obligados a ser humildes; o más bien, en otras palabras, bendito es el que cree en la palabra de Dios, y es bautizado sin obstinación de corazón; sí, sin habérsele llevado a conocer la palabra, o siquiera compelido a saber, antes de creer.

D&C 38
24  y estime cada hombre a su hermano como a sí mismo, y ponga en práctica la virtud y la santidad delante de mí.
25  Y de nuevo os digo, estime cada hombre a su hermano como a sí mismo.

Jacob 4
10  Por tanto, hermanos, no procuréis aconsejar al Señor, antes bien aceptad el consejo de su mano. Porque he aquí, vosotros mismos sabéis que él aconseja con sabiduría, con justicia y con gran misericordia sobre todas sus obras.

3 Nefi 13
11  Y perdónanos nuestras deudas, como nosotros perdonamos a nuestros deudores.

Hay muchos consejos buenos del Presidente Benson que podemos poner en práctica para responder la pregunta del encabezado. También estas Escrituras citadas nos enseñan puntos importantes. Sería bueno repasar las lecciones del Libro de Mormón que tratan sobre las enseñanzas del Rey Benjamín (Lección 15 y Lección 16).



Para finalizar me gustaría que relacionáramos todo con lo que estudiamos en la Lección #7. En ese momento analizamos Moroni 7 como parte de nuestra búsqueda para entender la fe, el arrepentimiento, las ordenanzas del Evangelio y el principio de permanecer fieles. Ahora prestemos atención a estos versículos del mismo capítulo y relacionemos todo con la humildad.

Moroni 7
42  De manera que si un hombre tiene fe, es necesario que tenga esperanza; porque sin fe no puede haber esperanza.
43  Y además, he aquí os digo que el hombre no puede tener fe ni esperanza, a menos que sea manso y humilde de corazón.
44  Porque si no, su fe y su esperanza son vanas, porque nadie es aceptable a Dios sino los mansos y humildes de corazón; y si un hombre es manso y humilde de corazón, y confiesa por el poder del Espíritu Santo que Jesús es el Cristo, es menester que tenga caridad; porque si no tiene caridad, no es nada; por tanto, es necesario que tenga caridad.
45  Y la caridad es sufrida y es benigna, y no tiene envidia, ni se envanece, no busca lo suyo, no se irrita fácilmente, no piensa el mal, no se regocija en la iniquidad, sino se regocija en la verdad; todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.


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